Las tres
funciones básicas de la evaluación son la diagnóstica, la formativa y la
sumativa. Estas funciones se definen en la forma siguiente:
a) La función diagnóstica: detecta el estado inicial de los
estudiantes en las áreas de desarrollo humano: cognoscitiva, socio afectiva y
psicomotriz con el fin de facilitar, con base en la información que de ella se
deriva, la aplicación de las estrategias pedagógicas correspondientes.
b) La función formativa: brinda la información necesaria y oportuna para
tomar decisiones que reorienten los procesos de aprendizaje de los estudiantes
y las estrategias didácticas utilizadas.
c) La función sumativa: fundamenta la calificación y la certificación
de los aprendizajes alcanzados por los estudiantes.