Artículo 5°. De las
competencias y responsabilidades de los actores.
El Ministerio de Salud
como ente rector de la salud, debe ejercer vigilancia de la salud pública. Para
dicha función, contará con la participación y suministro de datos de las
instancias generadoras de información. Dentro de ellas:
El INEC en el marco de sus competencias
proporcionará la información de estadísticas vitales, sociales, demográficas,
ambientales, la procedente de los censos nacionales de población y vivienda y
encuesta nacional de hogares, entre otros.
Instituciones académicas
universitarias como el Centro Centroamericano de Población, también tienen
dentro de sus competencias, el manejo de datos estadísticos, demográficos y
provenientes de encuestas y estudios de investigación.
El INCIENSA en su condición de
laboratorio oficial del Ministerio de Salud y responsable de la vigilancia
epidemiológica basada en laboratorio, realiza el análisis de laboratorio de
productos de interés sanitario, ejecuta el proceso de aseguramiento de la
calidad de los diagnósticos de la red nacional de laboratorios públicos y
privados, realiza investigaciones prioritarias en salud pública y acciones de
enseñanza en su ámbito de especialización.
Las instituciones prestadoras de
servicios de salud, tanto públicas como la CCSS como las entidades privadas,
son responsables de suministrar, de acuerdo con la periodicidad y formato que
el Ministerio de Salud defina, los datos requeridos para la vigilancia y
análisis de la situación de salud.
El AyA por medio del Laboratorio
Nacional de Aguas es responsable de suministrar información sobre la cobertura
y la calidad de agua que recibe la población que reside en el país, así como
apoyar en el estudio de brotes de probable origen hídrico.
Desde el enfoque de salud como
producto social, otras instituciones como el Ministerio de Agricultura y
Ganadería, Ministerio de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones, Consejo de
Seguridad Vial, Ministerio de Educación Pública, entre otras, generan datos
referentes a las variables sociales, culturales y ambientales que se incorporan
en el proceso de análisis y monitoreo de la situación de salud.